miércoles, 16 de enero de 2013

Como antes, de Ana Tortosa y Jacobo Muñiz

 
Como antes
Edelvives, 2010

Este libro me ha recordado a momentos de la infancia. Por suerte o por desgracia yo recaía muchas veces de gripe y tenía que pasar muchas horas en casa. Una de las actividades que más me gustaba hacer era observar y reobservar los álbumes de fotos de la familia. Y recordar e imaginar lo que no había vivido o lo que no podía recordar porque era demasiado pequeña.



Ana Tortosa nos presenta un texto sencillo y muy poético, como nos tiene acostumbrados. Y nos cuenta la historia de Leo que está recuperándose de una gripe y aunque se encuentra mejor su madre no le deja salir de casa. Para combatir el aburrimiento, cogerá el álbum de fotos y empezará a recordar cuando todos juntos, toda la familia pasaba las vacaciones en casa de los abuelos, cuando jugaba o discutía con su hermana, cuando sus padres “todavía” se cogían de la mano.
 
Pero las cosas han cambiado y Leo se pone triste, recuerda lo que dice su padre: “Aunque ahora algunas cosas son distintas, lo más importante nunca cambiará”.

Leo intentará cambiarlo, al menos, recortando y pegando de nuevo las fotos como el quisiera que estuvieran y a pesar del estropicio, ¿pensáis que su madre le regañará?

Un proyecto personal de Ana Tortosa e ilustrado por Jacobo Muñiz. “Es un proyecto personal al que le tengo especial cariño. Ana Tortosa me propuso que ilustrara un texto suyo construido a partir de frases sencillas y límpidas. La tarea no resultó fácil en absoluto, pues requería un gran esfuerzo estar a la altura de un relato que hacía diana perfecta y constante en el corazón. Puse lo mejor de mí mismo y el resultado fue el mejor de mis trabajos”, comenta Jacobo.


Las ilustraciones de Jacobo son a doble página y nos aportan algo más de lo que nos dice el texto. Por lo que la pareja de autores forman un buen tándem.
En resumen, una historia que aborda los sentimientos de un niño ante la separación de sus padres, los cambios que eso conlleva. Pero siempre le quedarán los recuerdos y que el cariño y amor de sus padres no cambiará. Ana Tortosa trata de una manera muy sutil este aspecto, ya que solo intuimos esta situación en una palabra.

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